Chile no le gana a Colombia por las eliminatorias desde el 4-2 en Medellín, cuando timbró el pasaporte rumbo a Sudáfrica 2010. La victoria 2-0 en la semifinal de la Copa Centenario es el último triunfo ante los cafeteros. En la Copa América de 2019, en São Paulo, el equipo que dirigía Reinaldo Rueda pasó a semifinales después de superar por penales a un cuadro colombiano que llegaba como favorito.
La noche de este martes 12, la Roja reinicia su camino a la Copa del Mundo en una maltrecha cancha del estadio Monumental. Y lo hace con un panorama complejo.
El impacto de la derrota ante Uruguay trajo a colación el pesimismo instalado a partir del estado general del fútbol chileno. En el Centenario la Roja se vio sobrepasada por un adversario que en la medida que ajustó las piezas, impuso su jerarquía individual. Uruguay, a pesar del escaso tiempo de trabajo, tuvo el sabor de un cuadro de Marcelo Bielsa. La aspiración de salir con vida desde Montevideo radicaba en el deseo, pero estaba lejana de la realidad.
La segunda jornada obliga a la selección nacional a sumar. Los antecedentes del primer párrafo sirven de contexto, ante un rival que llega con los tres puntos luego de imponerse a Venezuela y el dulce sabor de vencer a Alemania en Gelsenkirchen en la fecha FIFA de junio. Con 10 jugadores en las cinco grandes ligas, donde Luis Díaz (Liverpool) asoma muy destapado, a nadie le podría extrañar que se lleve los puntos desde Macul.
No se trata de derrotismo. Es realidad futbolera, aunque la presencia de Alexis Sánchez podría generar un cambio en La Roja. Lo vimos en el amistoso ante Paraguay, cuando el tocopillano modificó el trámite de un partido que se veía oscuro. Los informes de los reporteros que cubrieron la última práctica establecieron que Berizzo opta por Matías Catalán en el lateral derecho, Rodrigo Echeverría para acompañar a Erick Pulgar en la mitad del campo y Arturo Vidal de tres cuartos de cancha en adelante para tomar la conducción junto a Diego Valdés.
A primera vista se ve un equipo más duro, con mayor peso y estatura ante un rival de transiciones rápidas, buena estatura, al que habrá que apretar en la zona de los volantes. Catalán, zaguero central en Talleres de Córdoba, tiene una dura misión ante Luis Díaz. Su condición de jugador argentino natural es un factor que con seguridad el entrenador evaluó. Se requiere mayor consistencia para un cruce que requiere máxima concentración e intensidad. Porque lo más probable es que las ocasiones de riesgo no tendrían que abundar en la portería de Camilo Vargas.
En frío, el empate sirve para llegar con vida a los dos partidos de octubre, ante Perú y Venezuela. Esos duelos serán fundamentales para ilusionarse con la posibilidad de tomar uno de los cupos al Mundial de 2026 o al menos instalarse en el Repechaje. Con un ambiente espeso, con escaso apoyo de la mesa directiva de la ANFP, con un medio en contra casi por decreto, Berizzo y su cuerpo técnico requieren sumar.
En otro momento, empatar como local era visto casi como una afrenta. En esta ocasión, el punto permite iniciar el acomodo, sobre todo si mejora la expresión de juego. Es la hora de que Alexis Sánchez sume otra página a una trayectoria maravillosa. No juega desde junio y lo normal es que en esas condiciones no gravitara. El tocopillano tiene la palabra en La Roja.
